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(Sagunto,1938
– Guadasuar, 2010)
Mario Monreal Monreal realizó sus estudios musicales en Valencia, Madrid, Múnich (donde logró la calificación de "Suma cum laude" en Virtuosismo) y en Salzburgo.
Debutó como solista con la Orquesta Sinfónica de Berlín, interpretando el segundo concierto de Brahms.
El pianista José Iturbi, con quien le unió una estrecha amistad, lo presentó a finales de los años 60 en un recital en Madrid, una actuación que le abrió las puertas de los principales auditorios europeos y que le permitió realizar giras por Holanda, Bélgica, Francia y Alemania, además de España.
Uno de sus mayores éxitos de público y prensa lo constituyó su presentación, a mediados de los años ochenta, en el Teatro Colón de Buenos Aires, con la Orquesta Filarmónica, que fue seguida por tres actuaciones con las orquestas Nacional de Belgrado y de Ossodre en Montevideo, transmitidas por la TV argentina y uruguaya.
En los últimos años, obtuvo grandes triunfos en conciertos realizados en Holanda, Inglaterra, Italia, Sudáfrica, Polonia, Checoslovaquia y China.
A lo largo de su carrera pianística, ofreció grandes ciclos monográficos como los Estudios de ejecución transcendente de Liszt, Suite Iberia de Albéniz, Integral de las sonatas de Beethoven y Mozart, Integral de la música para piano de Chopin y obras del pianismo ruso del siglo XX, entre otros.
Estaba en posesión de numerosos premios en concursos tanto nacionales como internacionales, como el Concurso Internacional de Jaén, el Premio Nacional "Alonso", el Premio "Leopoldo Querol", el Premio Ciudad de Murcia, el Premio "Timken-Zinkann" de Bonn, el Premio "Antonio Iglesias" y el Premio Rathaus de Munich.
Realizó registros discográficos con obras de Mozart, Beethoven, Mendelsshon, Chopin, Liszt, Brahms, Chaikovski, Ravel, Grieg, Schumann, Prokofiev, Rachmaninov, Bartok, Eugen d'Albert, Manen, Cano, Samuel Barber, Falla y Halffter.
Era académico numerario de la Real Academia de San Carlos de Valencia, y había desplegado una amplia actividad docente como catedrático del Conservatorio Superior de Música de Valencia, y a través de numerosas clases magistrales. Autor de métodos de estudio de piano.
Entre sus obsesiones, y quizá la más decisiva, estaba la obsesión por un sonido limpio en el repertorio clasicista. Sobre todo, con Mozart.
Muy joven aún, recién llegado de Alemania, esa forma transparente de tocar dejó impactados a muchos estudiantes, aunque casi nunca consiguieron sacar del piano tales bellezas. Tenía también Mario su puntito mágico y esclarecedor, en el repertorio español. Una frase suya, una corrección, para tocar Albéniz: "Venga, venga, olvídate un poco del compás. Los gitanos no saben solfeo". Si hemos de escoger un recuerdo o un punto de su recorrido, será sin duda la transparencia de Mozart, también, la gracia de su Albéniz.
Mario Monreal recibió las primeras lecciones de su padre, Francisco Monreal, último director que tuvo la Banda de Música “El Arte” de Sagunto, y organista de la Iglesia de Santa María. Su sobrino Juan Francisco Castillo Monreal, es el continuador de la dinastía musical como concertista de piano y profesor de conservatorio.
Célebre fue el concierto-homenaje a Joaquín Rodrigo, en Sagunto, el año 1981 donde interpretó, magistralmente, el “Preludio del gallo mañanero,” de Rodrigo.
En 2006 dio un concierto en Sagunto, en el Auditorio Joaquín Rodrigo, de Sagunto.
En 2011 fue nombrado Hijo Predilecto, por el Ayuntamiento de Sagunto, y se colocó la primera piedra del futuro Centro Cultural Mario Monreal.
En 2013 se inauguró, en Sagunto, con un recital de piano, el Centro Cultural “Mario Monreal,” con asistencia de su familia.
En 2015 Sagunto rindió un Homenaje a Mario Monreal en el Centro Cultural que lleva su nombre, con un concierto de piano, a cuatro manos.
Bibliografía: Diario “Público”
“Diccionario Bibliográfico” de Emilio Llueca.
“De Cent en Cent” de Lluís Mesa.
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